cupcake camp's day (capkeis camps dei)

hoy ha sido, para variar, un buen día...de hecho un muy buen día. Si sigo a este ritmo voy a necesitar situaciones muy extremas para no caer en la rutina, es como si me estuviera volviendo yonki de felicidad y fuera a necesitar siempre dosis más duras.

Después de (por fin!) mudarme, arreglar mi habitación (que por cierto me encanta) y un largo etc de cosas aburridas he ido al CUPCAKE CAMP (leerlo con cara de felicidad, por favor) donde pagabas 10 euros por una bebida y te podías comer todos los cupcakes que quisieras...las había de millones de colores, sabores y tamaños (en cuanto Alison me pase las fotos las pondré), asi que hemos acabado con unas ganas horribles de vomitar, de hecho no quiero ver nada dulce nunca más (o almenos hasta mañana). La comida gratis es muy peligrosa, saca lo peor de cada uno.

Luego hemos ido a hacer un poco de turismo paseando por parques y edificios. Solo en Paris podría existir una exposición sobre espantapájaros hechos por diseñadores famosos con materiales reciclables...en fin...

El día ha acabado con todos los amigos de Alison tomando cervezas en un pub irlandes...mi francés por ahora no ha mejorado casi nada, pero el inglés lo hablo que es una maravilla!

Y eso es todo, mi glamour y yo nos vamos a ver una serie y a dormir, que mañana quiero bajar a desayunar con chris y a "hacer recados", ire a lugares, a muchos lugares, cual rubita del cabanyal. Pero eso será mañana.

PD: es horrible porque no tengo material para hacer buenas entradas en el blog y me acabo conformando con hacer una crónica aburrida de mi día. Creo que la estabilidad emocional me está anulando como escritora (pufff, menos mal que he recuperado un poco el drama)