hay momentos que no tienen precio, y te devuelven a modo de guiño a una realidad en la que te sientes en casa, en la que aunque pienses que serà inevitable echar de menos siempre Italia te das cuenta de lo mucho que has echado de menos Madrid sin pararte a pensarlo
El primer gran momento de esos ha sido en el autobús hacia Callao, en el que Almudena, Jota y yo comentábamos (más en alto de lo que deberíamos visto el caracter politicamente incorrecto del contenido) la descripición de nosotros como amigos y nuestras cualidades más destacadas que hacían posible esa unión. Hacia mucho que no me reía de esa forma, no es que no haya reído de otras muchos igualmente maravillosas últimamente, pero esa risa ácida y cómplice bañada de 133 merecía el título del blog, aunque no sea tan fácil entenderlo
Y luego andar por el centro, y coger el buho, y ver lo bien que funciona el trasporte público en la casa de mi Espe, y el llamarnos por teléfono hasta llegar a casa para asegurarnos de que llegamos bien (como serà cuando me mude?)
Mañana las fiestas de Arenas, y es el primer año que no las vivo para nada como las vivía antes, ni siquiera un poco, nada. Me apetece comer en el porche, y pasar timpo con Jota, y ver a Ali y tomar algo, me apetece ver una peli y a lo mejor salir...me apetece ver a la gente de lejos, y a algunos ni verlos...como cambia el tiempo GRACIAS A DIOS
Parece que no va a ser tan dificil eso de volver, aunqe me niego a pagar otra vez esa barbaridad propia de capital por una hamburguesa que no terminarè de digerir nunca
PD: Mar es mi nueva mejor amiga, pendiente grupo facebook para hacerme fan
llamada de atención
Hace 13 años